El Códice de las Huelgas por El Ensamble de la Abadesa
“El Códice de las Huelgas, joya de la polifonía medieval española” interpretado por El Ensamble de la Abadesa, por Lucía Martín-Maestro Verbo (musicólogo)
El Códice de las Huelgas
El Códice de las Huelgas es uno de los testimonios más importantes que se conservan de la cultura musical medieval de la Península Ibérica.
Contiene un total de 186 composiciones, escritas originalmente a lo largo del siglo XIII y comienzos del XIV, y combina una rica colección de música monofónica y polifónica tanto autóctona como de otros lugares de Europa, especialmente de Francia. Los contenidos de este códice presentan una variedad más amplia que la mayor parte de las fuentes de música polifónica anteriores al Ars Nova, pues incluye organa basados en canto llano, tanto del Ordinario como del Propio, además de otras piezas de carácter paralitúrgico, como secuencias, motetes y conducti, cuatro planctus e, inclusive, un ejercicio de solfeo. La naturaleza mixta del códice es especialmente peculiar, ya que ninguna otra colección combina un espectro tan amplio de géneros diferentes. De hecho, es muy probable que prácticamente todo el repertorio musical requerido por el convento a comienzos del siglo XIV se hallara contenido en este manuscrito.
En términos de su aspecto físico, el códice parece incongruente con respecto a la inmensa riqueza del Monasterio de las Huelgas. Algunos factores como la pobre calidad del pergamino y de la caligrafía, la falta de atención a errores textuales básicos y la total ausencia de iluminaciones y adornos, dificultan situar al Códice a la misma altura que los grandes manuscritos franceses de organa y de motetes. No cabe duda sobre que, si este códice hubiera sido concebido como objeto de prestigio, se habría invertido mucho más dinero y trabajo en su confección y decoración. Sin embargo, el prestigio descansaba en la riqueza de la propia música, que se valía de todas las prácticas más avanzadas y elaboradas de Francia y de otros lugares. La naturaleza del repertorio, su contenido y ordenación apuntan directamente a propósitos prácticos, mucho más de lo que lo hace ninguna otra colección de la incipiente polifonía. Por tanto, el aspecto físico del códice es el de un libro diseñado para utilizarse.
Hay que ser cautelosos en cuanto a la suposición que se hace tan a menudo de que la música del Códice de las Huelgas la cantaban las propias monjas. Como se ha podido observar, el convento de las Huelgas no era en absoluto un convento cisterciense normal. Además del centenar de monjas, todas ellas de elevado rango social, debía haber alrededor de cuarenta sirvientas, a lo que hay que añadir un total de diecisiete capellanes, además de los freyres que administraban las propiedades del convento y los artesanos mudéjares. Por esto, parece igual de probable que esta música no la cantaran las propias monjas en el coro, sino que fuera interpretada como un embellecimiento de sus cultos por parte de algunos de los citados capellanes en un lugar diferente de la iglesia conventual, o incluso, en algunos casos, fuera de ella, en un entorno extralitúrgico. Además, en el convento burgalés no se recoge ningún documento que haga mención de las monjas como intérpretes de la música, de hecho, algunas rúbricas que aparecen en el interior del códice indican que son personajes masculinos los encargados de la interpretación de la música polifónica.
Sin embargo, existen varias evidencias, tanto lingüísticas como de repertorio, que demuestran que el volumen se compuso para el uso en un cenobio femenino y, además, castellano. El indicio más importante es el elevado número de piezas marianas que contiene el códice, que viene a subrayar la propia advocación del convento. Del mismo modo hay que destacar la presencia de los lamentos fúnebres que se agrupan al final del manuscrito, ya que es conocida la presencia de plañideras profesionales en la Península Ibérica, especialmente de mujeres viudas, muchas de las cuales tomarían los hábitos después de enviudar. Hay otros factores que avalan la procedencia ibérica del códice. Un ejemplo es Rex Obiit, el planctus escrito en memoria del Rey Alfonso VIII de Castilla, cofundador del Monasterio de las Huelgas, que formaba parte del plan original del manuscrito. Éste es un indicio indudable que ayuda a situar al manuscrito en el seno del reino de Castilla, y más concretamente en el propio convento de las Huelgas.
En cuanto a la ortografía empleada, el copista principal recoge numerosos ejemplos de vulgarismos castellanos e hispanismos, y demuestra la pobreza del modo de escribir el latín en la Península. En suma, todo parece indicar que el Códice de las Huelgas fue compilado especialmente para su uso en el Convento de Santa María la Real, en Burgos.
El Ensamble de la Abadesa
Entre los objetivos principales de El Ensamble de la Abadesa está el de dar a conocer y difundir este repertorio tan poco habitual en el panorama musical actual.
Formado por seis cantantes de amplia experiencia, contando con musicólogos entre sus componentes y bajo la dirección de Ángel Chirinos Amaro, este grupo ofrece una interpretación crítica en términos musicales y lingüísticos, y renovada en sonoridad y estética, de la compilación que constituye uno de los mayores tesoros del arte medieval de la Península Ibérica: El Códice de las Huelgas.
El concierto monográfico sobre el Códice de las Huelgas en el Real Conservatorio Superior de Música de Madrid.
Para ello, el Ensamble de la Abadesa cuenta esta vez con la oportunidad de interpretar piezas de este interesante códice en el Real Conservatorio Superior de Música de Madrid.
Tras una cuidadosa selección y estudio del repertorio, el grupo ofrece este concierto no sólo a profesores y a estudiantes del conservatorio, sino a todos aquellos amantes de la música que deseen descubrir y disfrutar de este hermoso legado que aún se conserva en el mismo monasterio para el que se confeccionó.
De Burgos a Madrid…
El Ensamble de la Abadesa os invita a todos a disfrutar de este concierto.
“El Códice de las Huelgas, s.XIV”
Sala Manuel de Falla – Real Conservatorio Superior de Música de Madrid
C/ Doctor Mata 2, Madrid
Entrada por la C/ Santa Isabel 53
20 de enero de 2012 a las 19h.
Componentes de El Ensamble de la Abadesa
– Lucía Martín-Maestro Verbo, soprano
– Paloma Navarro de la Madriz, soprano
– Andreína Williams Araujo, soprano
– Paloma Fuentes Alzu, alto
– Daniel Martín Salvador, contratenor
– Ángel Chirinos Amaro, sopranista y director