“Que veinte años no es nada…”, por César Alejandro Carrillo
Compartimos las bellas palabras que el maestro César Alejandro Carrillo dedica a su coro Cantarte con motivo de su XX Aniversario y que publica en su blog Musicarrillo. Qué hermosa manera de conocer a la agrupación y su trayectoria…
“Que veinte años no es nada…”
Hace dos años, el 6 de julio de 2011, Cantarte cumplió veinte años de existencia. En esa ocasión, quise compartir a través del blog el texto que escribí para el programa de mano del concierto donde celebramos tan importante fecha para la agrupación. Por diversas vicisitudes del destino no lo pude hacer en su debido momento. Vaya el siguiente texto como pago de una deuda que no sólo tenía con Cantarte sino también con muchos de aquellos que, concierto a concierto, siguen con fidelidad nuestras andanzas y aventuras. Vaya también como una nota de celebración por nuestros recientes veintidós años.
¡Gracias a todos por esperar!
Que veinte años no es nada…
Así canta Gardel en uno de sus inmortales tangos, justo cuando se apresta a regresar a su ciudad de siempre después de una larga ausencia. Veinte años se dice muy fácil. Toda una vida para un joven; la mitad de su vida para alguien de cuarenta; un tercio para alguien de sesenta y un cuarto de su existencia para un octogenario. Muchas veces se ha empleado esta excelente frase gardeliana para expresar la brevedad de ese lapso. Pero también podemos decir que en veinte años caben cinco Copas Mundiales de Fútbol. También cinco Juegos Olímpicos. Para muchos, la espera entre una y otra edición de estos eventos deportivos significa un tiempo muy prolongado, puesto que hay que esperar cuatro largos años para poder sentir y vivir de nuevo la emoción que estos encuentros de la poesía muscular despiertan y nutren. Para un padre y una madre, un hijo de veinte años es la flor convertida en fruto maduro. Para un hijo, es sentir que el mundo le pertenece, impulsado por el ímpetu propio de la plena juventud. Todo depende de la intensidad con que se viven esos veinte años. O ese día. Porque la vida ha de vivirse día a día. Porque no sabemos qué nos espera mañana. Porque el día que se ha vivido a plena satisfacción deja el grato sabor del deber bien cumplido y que el día de mañana será otro día para continuar. O para empezar de nuevo. Veinte años. Parece que fue ayer, como dice otra canción.
6 de julio de 1991 [Año capicúa, cuyas cifras, además, suman 20.]
Ese día nació Cantarte, conjunto vocal que tengo el privilegio, la responsabilidad y el honor de dirigir desde el momento de su alumbramiento. Ese día nos reunimos dieciséis militantes de la música coral y yo, para conspirar a favor de la buena música a cappella, con el firme propósito de cultivar lo mejor de la literatura coral que estuviera al alcance de nuestras alternativas, conocimientos y habilidades. Pero sobre todo, entre muchos otros propósitos, el más importante, producir un sonido de conjunto bello y correcto como materia prima con la cual poder ejecutar e interpretar bella y correctamente, buena música. Es así como, durante todo este tiempo, hemos podido brindarle al público, destinatario final de todos nuestros empeños, la posibilidad de apreciar un repertorio escasamente abordado en nuestras salas de conciertos, iglesias y auditorios. La posibilidad del encuentro con la belleza del buen arte coral. La posibilidad de realizar estrenos nacionales y mundiales de compositores venezolanos y extranjeros. También, cuando tuvimos la posibilidad, la dicha de concretar con éxito la realización de tres encuentros nacionales de coros de cámara, reuniendo siempre lo más representativo del género en nuestro país. En estos veinte años también hemos podido dejar constancia de nuestra actividad en tres grabaciones que ya forman parte de la mitología de nuestra música coral. También hemos tenido la fortuna de representar dignamente a Venezuela, a veces sin más recursos que los nuestros, en importantes eventos más allá de nuestras fronteras. Y dentro de ellas también.
2002 – La música sacra
En un momento preciso de este transitar por los difíciles caminos del verdadero arte, tomamos la decisión de afinar más aún el propósito estético de nuestro devenir. Decidimos dedicar todos nuestros esfuerzos al estudio y difusión de la música sacra del Renacimiento y de nuestros días, conscientes de que el foco de nuestro trabajo se iba a estrechar, pero conscientes también de que este enfoque nos iba a permitir posicionarnos como pioneros al 100% en ese nicho tan esquivo en los repertorios de nuestro movimiento coral. Y, francamente, no nos ha ido mal. Al contrario, en estos nueve años dedicados de lleno a la música sacra hemos tenido un sinfín de satisfacciones en todos y cada uno de los conciertos que hemos realizado. No es una mera etiqueta cuando decimos “Cantarte: 100% sacro”. Es una certeza. Nunca olvido, al final de uno de tantos conciertos, a una señora de avanzada edad que, muy emocionada, se acercó a darme las gracias por lo que nosotros estábamos haciendo y por cómo lo hacíamos. Ese día dormí con la firme convicción de que nuestra propuesta y nuestro empeño bien valían la pena y que poco a poco iban dando sus frutos.
Hoy abrimos un espacio para darnos el gusto de cantar no sólo música sacra sino también una pequeña muestra de lo que hacíamos antes del viraje. Hubiésemos querido incluir una muestra mucho mayor pero el tiempo es un factor cruel que a veces no nos deja plasmar con plenitud todos nuestros deseos. Quizá para los veinticinco años, con el favor del Supremo.
Finalmente, y a título personal, voltear y mirar el camino recorrido me permite apreciar lo hermoso que ha sido; con rosas, espinas, goles y algunas zancadillas, por supuesto, pero hermoso. Hermoso sobre todas las cosas. Me ha permitido compartir también con gente fantástica que ha sabido enamorarse de lo que hacemos y que ha hecho de Cantarte parte importante de sus vidas, por la mera y única satisfacción de cantar bien y bonito. Por estas y muchísimas otras razones quiero agradecer infinitamente y por siempre a todos y cada uno de los integrantes que han pasado por nuestras filas y a los que aún siguen nutriendo con su presencia el día a día de nuestra tribu. Sin su concurso no hubiese sido posible que hoy estuviéramos aquí. Cada uno de ellos ha tenido, en el pasado, y tiene en el presente y futuro, una cuota muy importante en la concreción de todos nuestros aciertos. Finalmente, quiero agradecer muy especialmente a Miguel Angel Vaccari, por estar siempre, en las buenas y en las malas, en las venturas y en las desventuras; a Elena Mata, por ser y estar desde el principio, a Luis ‘Tatalo Garrido, My Big, por su entrega y buen humor; a Edel Coronado, que ya no está en nuestras filas, pero que es parte fundamental en la conformación de nuestra sonoridad; a Manuel Hurtado, por compartir la ruta de las responsabilidades en la dirección musical; y a Laura Morales Balza, por ser la artífice, durante los últimos diecisiete años, de toda la imaginería gráfica que hasta ahora nos ha identificado.
A todos y a ustedes, muchas gracias.
¡Feliz cumpleaños, Cantarte, que veinte años es mucho, y es apenas el comienzo!
César Alejandro Carrillo
Compositor, arreglista y director de coros de destacada y reconocida trayectoria. Inició sus estudios musicales en la Escuela Superior de Música “José Ángel Lamas”, donde cursó Teoría y Solfeo, Dictado Musical, Armonía, Violoncelo e Historia de la Música con José Agustín Maldonado, José Clemente Laya, Tiero Pezzutti, Florian Ebersberg y Walter Guido, respectivamente. Después realizó estudios de Composición en la Escuela “José Lorenzo Llamozas” con Modesta Bor. Luego ingresó al Conservatorio de la Orquesta Nacional Juvenil, donde obtuvo en 1987 el título de Director de Coros siendo sus maestros Michel Eustache y Alberto Grau. Es Licenciado en Música, Mención Dirección Coral, egresado del Instituto Universitario de Estudios Musicales (IUDEM) en 1997, con la distinción Cum Laude.
Ha realizado cursos de especialización con los maestros Luigi Agustoni (Suiza), Ernani Aguiar (Brasil), María Felicia Pérez (Cuba), Noemí Lugo (Venezuela), Robert Sund (Suecia), Vic Nees (Bélgica), Alice Parker (Estados Unidos), José Rafael Maldonado (Venezuela), Ghislaine Morgan y Peter Philips, éste último, director de The Tallis Scholars (Inglaterra).
Desde 1981, despliega una intensa actividad al frente de diversas agrupaciones de la capital. Ha representado a Venezuela varias veces en el exterior, destacándose su participación con la Coral Juvenil Vinicio Adames en el IV Concurso Polifónico Internacional “Ciudad Ibagué”, celebrado en Colombia (1983) obteniendo el 2° Premio en la Categoría Clásicos y la Medalla de Excelencia Musical. Desde 1983 hasta 1991 fue director e integrante-fundador de Ensamble 9, agrupación dedicada al cultivo y la difusión de la música popular venezolana y latinoamericana. En diciembre de 1994, con Cantarte, vuelve a Ibagué para participar en la VII edición de dicho concurso, obteniendo el Primer Premio en la Categoría Clásicos. En octubre de 1995, con Cantarte, logra el Primer Premio de la Primera Competencia Nacional de Coros Mérida ’95, así como también el Premio del Público al mejor coro. En julio de 2003 conquista, como director invitado al frente del Coro de Cámara de Mérida, el Primer Premio en la Categoría de Habaneras en el XLIX Certamen Internacional de Habaneras y Polifonía, en Torrevieja, España. Al frente de las agrupaciones que dirige ha realizado conciertos y talleres en Ecuador, Aruba, México, Cuba, Colombia, Estados Unidos, Puerto Rico, Portugal, Francia, Chile, Argentina, Uruguay, Brasil, República Popular China, Japón, Corea del Sur, Taiwán, España, Holanda, Alemania, Inglaterra, Finlandia, Estonia, Dinamarca, Noruega, Suecia y República Checa.
Con Cantarte, lleva a cabo una importante labor de difusión del repertorio de música sacra a cappella tanto del Renacimiento como del siglo XX hasta nuestros días.
Se ha desempeñado como profesor de música en el Colegio Emil Friedman y como profesor de Práctica Coral en el Conservatorio de la Orquesta Nacional Juvenil. Actualmente ejerce la docencia en la Universidad Nacional Experimental de las Artes (UNEARTE). Ha participado como jurado y como conferencista en diferentes eventos a nivel nacional e internacional, así como también ha impartido talleres de arreglos corales y de dirección coral.
Fue seleccionado para dictar el taller Música Popular Caribeña en el marco del América Cantat III celebrado en Caracas, en 2000, al frente de Cantarte. En mayo de 2010, cumplió con una invitación para impartir dos talleres en España sobre su música y otros autores. El primero de ellos en Tomelloso, para el Conservatorio de Música de esa ciudad, y el segundo en Pamplona, para la Federación de Coros de Navarra. En agosto de 2011 fue invitado a participar como profesor en el XV Curso de Canto Coral, Técnica Vocal y Dirección Coral de Segovia, que organiza la Coral Ágora, de esta ciudad; y en julio de 2012 como profesor en el Seminario para Directores de Coros de Bachillerato, en Buga, Colombia, organizado por Corpacoros.
Su obra creativa ha estado dedicada exclusivamente a la música coral. Su labor como compositor ha sido galardonada hasta el presente en más de 20 oportunidades. Entre los distintos premios se encuentran: Premio Nacional de Composición, (1982, 1991); Premio Municipal de Composición (1984, 1988, 1992, 1998, 2000); Premio para la música del Himno del Municipio Chacao (1994); Concurso de Arreglos Corales “Modesta Bor” (1994, 1997) y en diversos concursos de composición. También ha realizado arreglos para artistas como Ilan Chester, Serenata Guayanesa, María Teresa Chacín, Cecilia Todd, entre otros. Sus composiciones y arreglos han sido grabados e interpretados por prestigiosas agrupaciones en Europa y América, lo cual lo destaca como uno de los autores de música coral más importantes e interpretados del país.
El III Volumen de la colección Música Coral de Autores Latinoamericanos, publicado por la Fundación Vicente Emilio Sojo en 2002 (reeditado en 2010), contiene toda la obra coral de Carrillo hasta esa fecha. Dicho libro también contiene una selección de arreglos de música popular venezolana. Las editoriales Santa Barbara Music Publishing y Earthsongs dan a conocer su música a nivel internacional. Es autor del libro Música Sacra – Guía de textos latinos traducidos al español, publicado por Lulu.com, 2008.
Estuvo al frente del Orfeón Universitario de la UCV “Patrimonio Artístico de la Nación”, primero como director asistente [1992-1999] y luego como Director Titular entre 1999 y 2012. Actualmente se desempeña como director al frente de las siguientes agrupaciones: Cantarte (Director-fundador, 1991) y Coral Antiphona, de Maracaibo (2010). Es integrante fundador y arreglista deBolanegra, conjunto vocal dedicado a la música popular.