Inicio » Ad libitum, Aportaciones, De interés, obras

Composiciones del Archivo Musical de la Catedral de Jaca, por Sara Escuer

Publicado por el 07 May 2011 Sin Comentarios

Sólo caben admiración y agradecimiento cuando los jóvenes profesionales de la música dedican su tiempo y su esfuerzo a enriquecer nuestro patrimonio cultural.

Bravo, amiga Sara, y… ¡¡Muchísimas gracias!!

Composiciones del Archivo Musical de la Catedral de Jaca,  por Sara Escuer

Estreno tras su estudio y transcripción de dos obras de los Maestros Joseph Conejos y Blas Bosqued

Catedral de San Pedro, Jaca. 14 de mayo de 2011 – 22 horas

“El tiempo se detiene. El mundo a mi alrededor se torna silencio. La única luz de la sala ilumina la mesa sobre la que estoy apoyada. Todo lo demás se vuelve oscuro a mis ojos, quizá porque lo único que en este momento centra mi atención está justo delante de mí. Es la primera toma de contacto con unas partituras que, en otro tiempo, en una sala similar y seguro que no muy lejana a ésta, alguien escribió nota a nota, letra a letra, plasmando en ellas sus inquietudes, su sensibilidad, sus oraciones, su pasión por la música.

A pocos metros de donde estoy, en el altar mayor, el Cabildo Catedralicio está celebrando la misa conventual. Sus cantos y las partituras que tengo delante me trasladan a otros tiempos pasados. Es el año de Nuestro Señor 1745. Joseph Conejos, llegado de Zaragoza once años antes, es el maestro de una capilla formada por niños y jóvenes cantores, algún sacerdote y varios instrumentistas. En el coro, situado en la nave central, el maestro reparte las particellas de la composición en la que está trabajando. Entre los jóvenes hay uno que sigue atentamente sus instrucciones: se llama Blas Bosqued y nació en esta ciudad hace apenas dos décadas. Quizá unos y otros todavía no lo sepan, pero cinco años más tarde este alumno aventajado será el sucesor de su maestro. En 1750, con tan solo 23 años, Blas Bosqued asumirá el cargo de maestro de capilla, puesto en el que permanecerá hasta su muerte en 1799.

El leve sonido de una puerta al abrirse a mis espaldas me devuelve al siglo XXI. Me desorienta… ¿Qué ha pasado? Ah sí, ya recuerdo, estaba pensando cómo iniciar el trabajo de transcripción de estas partituras. Tenemos que hacer con ellas un concierto dentro de poco más de un año, no hay tiempo que perder”.

Así comienzan las notas al programa del concierto que tendrá lugar el próximo 14 de mayo a las 22h en la Catedral de Jaca. En este concierto se podrán escuchar por primera vez en el siglo XXI y tal vez también en el siglo XX, dos obras que fueron compuestas por dos maestros de capilla de esta Catedral entre los años 1745 y 1750. Si les parece vamos a contar esta historia desde el comienzo.

Nos remontamos a los primeros meses del año 2010. Todavía falta un año y medio para alcanzar el final de una larga carrera musical, iniciada en 1996 en el Conservatorio Profesional de Música de Sabiñánigo y continuada en el Conservatorio Superior de Música de Aragón, en Zaragoza. A pesar del curso y medio que todavía queda para terminar, la elección del tema sobre el que centrar el Proyecto Fin de Carrera está ya cerrada. En realidad estuvo claro tiempo atrás, pero entonces era sólo una posibilidad; ahora es ya un hecho: quiero dedicar mi proyecto de investigación al Archivo Musical de la Catedral de Jaca.

El primer paso, el primero de tantos que se darían después, es hablar con la persona que trabaja directamente con los fondos que conserva este Archivo: D. Jesús Lizalde Giménez, quien lleva varias décadas custodiando cientos, miles de pliegos, documentos, manuscritos, libros, códices, escritos en los últimos cinco siglos.

Es necesario concretar el trabajo que se quiere realizar. Las posibilidades son infinitas pero para poder empezar hay que dar pasos pequeños, marcarse unos objetivos claros y otorgarles una finalidad específica. El primero es elegir una obra o tal vez dos, que no hayan sido transcritas desde su creación, para interpretarlas en el concierto fin de carrera. De este modo y aunque esta condición no es requerida en ningún caso por el tribunal examinador, las dos grandes metas que un alumno de conservatorio debe alcanzar al finalizar su carrera, el concierto y el proyecto, girarán en torno al mismo tema. Este primer paso dio sus resultados en abril de 2010, cuando tuve por primera vez entre mis manos las partituras manuscritas de 1745 y 1750 de los maestros Joseph Conejos y Blas Bosqued.

El siguiente paso consiste en digitalizar todo el material. El trabajo de transcripción es un proceso largo y la manipulación constante de estos pliegos los deterioraría peligrosamente. Al no disponer de un escáner de luz fría, el más adecuado para esta tarea, se procede a tomar imágenes mediante una cámara fotográfica de alta resolución, empleando como iluminación únicamente la luz de la sala, en ningún caso el flash de dicha cámara, que resultaría altamente agresivo para los documentos. Las imágenes fotografiadas a gran resolución de las más de ciento cincuenta páginas que componen estas dos obras servirán para iniciar el trabajo musicológico. Es un trabajo delicado y riguroso en el que la prioridad que prevalece sobre todas las demás es el respeto hacia el material estudiado y la conservación en el mejor estado posible de los pliegos originales.

Desde este momento el trabajo de transcripción se hace desde casa. Ésta es la parte del trabajo más extensa, intensa y apasionante y es el eje central de mi proyecto. Durante los nueve meses de dedicación casi exclusiva que durará este proceso, el tiempo transcurrirá de otro modo. Se perderá toda referencia del paso de las horas, de los días, de las semanas. Todas las horas del día y de la noche, hasta bien entrada la madrugada, parecerán insuficientes para avanzar en una tarea que durante los primeros meses y a causa de las grandes dificultades que presenta, nos hace creer que nunca va a alcanzar la forma definitiva. Las partituras originales, escritas por separado para cada uno de los instrumentistas y voces del coro, lo que en términos musicales se conoce como particellas, presentan incorrecciones en el momento en que se agrupan formando la partitura general. En algunas ocasiones falta un compás, otras veces se forman acordes disonantes carentes de significado en ese momento histórico-musical, algunas grafías en los compases de silencio inducen a errores que deben ser solucionados utilizando, no sólo conocimientos musicales, sino también una gran dosis de intuición. En este tiempo se corrigen notas, se comparan textos, se revisan las fotografías de los originales una y otra vez.

Y cuando las incógnitas resultan desbordantes, algo que sucede varias veces en todo este tiempo, se pide consejo a prestigiosos musicólogos, latinistas, cantantes expertos en música antigua, instrumentistas especializados en instrumentos de época; se consulta incluso el texto en una edición de Biblia Vulgata (escrita en latín) del siglo XVIII.

A partir de septiembre, tras el inicio del curso académico, este trabajo se combina con los ensayos con los músicos que interpretarán las obras meses más tarde. Al igual que los maestros Conejos y Bosqued, también ahora se va entregando el trabajo al coro según se va avanzando en su transcripción. Por fin las obras que habían estado tantos años silenciadas bajo el techo de la sala del Archivo vuelven a convertirse en sonido. Este punto, además de emocionante y verdaderamente gratificante, es esencial a la hora de revisar el trabajo de transcripción. Todos los errores que hayan podido pasar desapercibidos hasta el momento podrán ser ahora localizados y rectificados.

No será hasta enero cuando el proceso de transcripción quede finalizado. Por entonces han pasado ya nueve meses.

Lo que sigue a continuación ustedes ya lo saben. El próximo 14 de mayo, un año después del inicio del proceso de recuperación de estas obras, dos siglos y medio después de su creación, la obra de estos maestros del siglo XVIII, su sensibilidad, sus inquietudes, su dedicación, sus plegarias, volverán a hacerse Música, llenando de sonidos todos los rincones de la hermosa casi milenaria Catedral que las vio nacer.

Ese día, sentir el aire vibrar impulsado por las voces de los cantantes y cantores, por las cuerdas, los tubos y las cañas de los instrumentos, viajando entre las bóvedas y naves que se llenan de viejos sonidos que vuelven a su memoria; sentir el calor del público a mi espalda, este público tan especial, el de casa y por primera vez en casa, en esta catedral en que se han desarrollado algunos de los momentos más felices y más tristes de mi vida; sentir todo esto puedo asegurarles que será compensación más que suficiente por todo el tiempo y todo el esfuerzo que ha supuesto llegar hasta aquí. Espero que al igual que yo, ustedes también lo disfruten.

Sara Escuer Salcedo


– A Pepe, in memoriam –


Catedral de San Pedro, Jaca. 14 de mayo de 2011 – 22 horas

SONATA EN SOL MAYOR*

Jordi Rodríguez – ca. 1700

TOCATA PARA EL HARPA*

Arcangelo Corelli

* Las dos obras para arpa proceden de un manuscrito recopilado durante los siglos XVII y XVIII que fue encontrado en el Archivo de la Catedral de Jaca. Esta recopilación de gran valor musicológico, incluye obras para órgano del compositor valenciano de reconocido prestigio Joan Cabanilles. Estas obras fueron editadas por el musicólogo Santiago Kastner a finales del s.XX

SALVE REGINA

Joseph Conejos – Año 1745

MISERERE

Blas BosquedAño 1750

I. Miserere – (Coro)
II. Amplius lava me – (Aria soprano)
III. Tibi soli peccavi – (Coro)
IV. Ecce enim – (Soprano I – II)
V. Auditui meo – (Coro)
VI. Cor mundum – (Aria soprano)
VII. Rede mihi – (Coro)
VIII. Liberame – (Aria tenor)
IX. Quoniam – (Soprano I – II)
X. Benigne fac – (Aria tenor)
XI. Tunc imponent – (Coro)

CORO

SOPRANOS I

Vanesa García Simón
Julia Martín Arias
Elena Salvatierra Sánchez

SOPRANOS II

Katia Moll Barceló
Alejandra Rojas
Noelia Torres Toda

ALTOS

Ana Domingo Puertas
Nuria Estaún Miranda
Fernando Parrilla Climent

TENORES

Céler Gutiérrez Dávila
Víctor Jiménez Puente
Joel Reynoso

SOLISTAS

María de los Llanos (soprano)
Ignacio de Lekerika (tenor)

ORQUESTA

Alejandro González Álvarez (Oboe)
Héctor Morcillo Sánchez (Violín)
Gonzalo Gómez Fernández (Violín)
Andrea Martí Garasa (Violoncello)
Cristian Coliver Sánchez (Fagot)
Manuel Díaz del Blanco (Contrabajo)
Regina Domínguez Celorrio (Arpa)
Jon Sarasúa Pastor (Clave)
Lorena Peugnet (Órgano)

ARPA Gloria Martínez García

DIRECCIÓN: Sara Escuer Salcedo

ORGANIZAN:

Excmo. Ayuntamiento de Jaca
Escuela Pública Municipal de Música y Danza de Jaca “Pilar Bayona)
Museo Diocesano de Jaca

COLABORAN:

Diócesis de Jaca – Cabildo Catedral
Institución Fernando el Católico


No te pierdas las últimas noticias en portada.

Tags: , , , , , , ,

Posts relacionados: